¿Te animás a iniciar este camino?
Para eso les proponemos cuatro movimientos misioneros (o etapas): Fascinar, Escuchar, Discernir y Convertir. Sin prisa pero sin pausa a través de encuentros para comunidades juveniles, paso a paso, guiados por el aliento del Espíritu y abiertos a descubrir y construir los odres nuevos para el vino nuevo, van a poder transitar un proceso de revitalización de la pastoral con los jóvenes y para los jóvenes.